LA SOBERBIA NO ES GRADENZA SINO HINCHAZÓN; Y LO QUE ESTÁ HINCHADO PARECE GRANDE PERO NO ESTÁ SANO

San Agustín

Estamos viviendo un momento histórico de gran agitación social debido a la restricción de derechos sociales y libertades individuales que la pandemia del COVID-19 ha causado a nivel global en nuestras sociedades. La sociedad española no ha escapado al impacto del COVID-19 y esto ha supuesto una gran frustración social y un enfado generalizado por no poder desarrollar nuestras libertades desde hace más de un año.

En este ambiente de “crispación social” es muy fácil colimar los sentimientos colectivos y generar desánimo, descontento y potenciar el sentir de las personas respecto a la crispación que sienten. Y, basta con señalar a un contrario como causante de todos los males que estamos sufriendo, para que ese descontento social se canalice y se pueda aprovechar para otros fines muy diferentes de los que todos podemos pensar o creer. Lo vemos a nivel político global, europeo y nacional todos los días y también ocurre en nuestro día a día laboral y personal.

En el caso de la sentencia del CORE, hay una fuerza sindical que está orientando ese sentimiento de descontento hacia otras opciones sindicales que pueden con su trabajo diario llegar a competir en igualdad de oportunidades y presencia. Ha bastado con decir verdades a medias y verter críticas sobre cómo realizar la acción sindical para con nuestros compañeros y compañeras, olvidando su propia máxima, la “UNIDAD”, para provocar desunión y lograr debilitar al contrario, cuando la realidad es que “la unión hace la fuerza”.

En todo el proceso descrito, la Sección Sindical de la USO no ha ido en contra de ningún colectivo, ni de compañeras o compañeros de las 15 empresas que están bajo el amparo del Convenio Colectivo de Iberdrola Grupo, ni de otras opciones sindicales, incluyendo a los firmantes o no del actual convenio vigente, nos apoyen o no, porque creemos que la individualidad es contraria a los intereses de nuestros compañeros y compañeras. Sin embargo, no dudamos en trabajar, solos o conjuntamente, por el bienestar común.

Para la Sección Sindical de la USO la sentencia del CORE es bienvenida, como ocurriría con cualquier otra mejora salarial, mejora de derechos y/o mejora social de cualquier trabajador o trabajadora de Iberdrola Grupo; con independencia de número, género, empresa y ocupación, porque para la USO todos somos compañeros y compañeras en igualdad de derechos y deberes.

En toda discusión siempre hay dos verdades y dos puntos de vista que son de entrada respetables y la USO respeta cualquier opinión y acepta las opiniones de los demás si son por el bien común. En este caso, se nos critica como si fuéramos los causantes de una desigualdad entre colectivos, cuando somos 15 colectivos distintos con múltiples casuísticas diferentes y con “mochilas” diferentes, para los que cualquier solución común nunca es ni buena para todos ni conveniente para ninguno.

La USO siempre está dispuesta a defender a las trabajadoras y trabajadores, en igualdad de trato, sin prepotencia y buscando el bienestar común, sin ambages ni intereses ocultos. La unidad sindical ayuda y representa un frente común ante la Dirección de la Empresa y así lo percibe el trabajador o trabajadora, por lo que como nosotros tenemos razones para apostar por el bienestar y la seguridad laboral, también nos gustaría que otros sindicatos las apoyasen, porque de entrada son tan válidas como las de cualquiera.

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